La Exiliada del Sur

El pasado miércoles 4 de octubre se cumplió el aniversario n° 89 del natalicio de Violeta Parra, la folklorista más importante de Chile. Artista completísima que además se destacó en el arte textil, en pintura, escultura, y cerámica. Como lo hice anteriormente con Gabriela Mistral, me propuse hacer un dibujo de ella, pero al igual que la vez anterior me resfrié ¡¡de la nada!! (porque pucha que me cuido) el cerebro se me anduvo medio soltando del ataque de mocos y estornudo, no pude hacer nada ese día así que ayer con las energías repuestas comencé y terminé este dibujo . Bueno, qué se puede hacer contra estos resfrios anti-homenaje.

Es extraño, pero a la hora de hacer el dibujo, y como tengo la manía de empezar por los ojos, durante todo el periodo de rayar, borrar y volver a rayar, sentía que con su mirada me decía "más vale que te quede bien". Y la verdad es que no es para menos, ella era tan seca en tantas formas de arte que al dibujarle me sentí intimidado por su temple. Nada peor que le mostraras a esta verdadera maestra tu trabajo, ya sea poesía, música, dibujo, etc. y que élla lo encontrara feo, malo, cualquiera se desalienta. Aunque si tuviera la oportunidad de mostrárselo lo más probableme es que preguntara ¡¿y por qué me dibujas a mí?

Pero ¡¿Cómo no homenajearla a élla?!

Es en definitiva la santa patrona del folklore chileno, y sin duda alguna una de las mayores musas inspiradoras del rock, y de la música en general, en nuestro país. Su labor recopilatoria y su viajes por nuestro territorio son la envidia de todo buen historiador y/o antropólogo. Porque si alguien supo de tradiciones, de personas, de historias, en fin, de cultura en nuestro país, fue Violeta Parra. En verdad una mujer que lo dio todo por un país que aun no ha sabido apreciarla. La inexistencia de un museo en Chile que albergue su obra y las dificultades que la fundación que lleva su nombre ha tenido para difundir su trabajo es prueba de ello. Es increíble que una artista de su calibre, que llegó a exponer en el Louvre (1964 - primera vez que se abría para una latinoamericana), no reciba el reconocimiento merecido. Una más de las falencias de nuestros gobiernos y sus gestiones culturales.

Lo anterior me demuestra una vez más que el verdadero arte no nace de las altas esferas del poder ni para éstas. El real arte nos relata la más cruel de las realidades con una irreverencia que más que entretener lástima el alma del que tenga el valor de sentir. Violeta demuestra que el verdadero arte lo encontramos en la existencia dolorosa y no en el sudor bajo los focos de la televisión, lo vemos en la alegría de lo sencillo y no en la fama que otorga la macabra industria musical. Hay muchos interpretes y personas talentosas, pero cantautores, artístas del porte de Violeta Parra hay pocos, ella es la hermosa flor en el inmenso pastisal del que el rebaño inconciente se alimenta.